A no confundirse. El cacerolazo, en la ciudad de Buenos Aires, es una sumatoria de causas que encontraron una excusa en el paro del campo. Es difícil creer que los vecinos de Acoyte y Rivadavia, por ejemplo, tengan algo que perder con las retenciones del campo.
Es la plata que no alcanza, es la mentira de una inflación oficial y una que se siente en el bolsillo, es cansancio por la prepotencia K, tanto de Néstor como de Cristina, es Alberto Fernández y Guillermo Moreno, es el bolso de Michelli y la valija de Antonini.
Teniendo en cuenta lo que le pasó a De la Rua, el gobierno leyó que la represión no puede ser oficial y por lo tanto manda a sus grupos de choque y entonces aparece un comunicado que afirma que "Los movimientos sociales nos movilizamos esta noche a Plaza de Mayo para enfrentar a los golpistas que quieren derrocar al gobierno popular que encabeza la presidenta Cristina Fernández de Kirchner".
Es excesivo creer lo que afirma el kirchnerista Luis D’ Elia, dirigente de la Federación Tierra y Vivienda (FTV), a CríticaDigital que “vamos a la Plaza para enfrentar a los golpistas”.
25.3.08
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
yo lo vi como un mensaje mafioso: quedense en sus casas o van a salir lastimados.
la gente que fue a protestar era, en su mayoria, familias y no querian problemas.. y los piqueteros de d'elia estaban con palos.
Publicar un comentario