El campo se atrevió a desafiar la autoridad presidencial; y la ciudad encontró una excusa para salir a expresar su descontento.
En casa de gobierno y su extensión de Puerto Madero no comprendían quienes eran los que estaban quejándose. La soberbia y la omnipotencia no deja ver los propios errores y cuando otros los señalan es por que no saben ver lo mucho que se los beneficio.
“Si ganamos las elecciones caminando con el candidato muleto, si gobernamos el 70% del país, si tenemos mayoría propia en ambas cámaras, si el país crece gracias a nosotros a ritmos in imaginados, si nadie hizo mas que nosotros por la Nación ¿Qué es lo que quieren?”
No esta acostumbrado a que lo enfrenten y el cacerolazo le trajo recuerdos de otros a los que no quieren parecerse. Los teléfonos sonaron. “La Plaza es del pueblo y nosotros somos el pueblo dijeron en Puerto Madero”. D´Elia se puso su camisa negra y salió a recuperar la Plaza que estaba en manos de los “golpistas”.
El gobierno no se ruborizo de utilizar a sus fuerzas de choque, más parecidas a las SA hitlerianas y a las “Camisas Negras” de Mussolini que a defensores de la democracia.
El gobierno K se aleja cada vez más de la gente emprendiendo un camino de difícil retorno, demostrando una incapacidad creciente de buscar consenso y mantener diálogos que acerquen posiciones. El autoritarismo se les escapa por los poros. Cada vez más se parece al Perón del 5 por 1 y cada vez menos de un gobierno popular y nacional.
En casa de gobierno y su extensión de Puerto Madero no comprendían quienes eran los que estaban quejándose. La soberbia y la omnipotencia no deja ver los propios errores y cuando otros los señalan es por que no saben ver lo mucho que se los beneficio.
“Si ganamos las elecciones caminando con el candidato muleto, si gobernamos el 70% del país, si tenemos mayoría propia en ambas cámaras, si el país crece gracias a nosotros a ritmos in imaginados, si nadie hizo mas que nosotros por la Nación ¿Qué es lo que quieren?”
No esta acostumbrado a que lo enfrenten y el cacerolazo le trajo recuerdos de otros a los que no quieren parecerse. Los teléfonos sonaron. “La Plaza es del pueblo y nosotros somos el pueblo dijeron en Puerto Madero”. D´Elia se puso su camisa negra y salió a recuperar la Plaza que estaba en manos de los “golpistas”.
El gobierno no se ruborizo de utilizar a sus fuerzas de choque, más parecidas a las SA hitlerianas y a las “Camisas Negras” de Mussolini que a defensores de la democracia.
El gobierno K se aleja cada vez más de la gente emprendiendo un camino de difícil retorno, demostrando una incapacidad creciente de buscar consenso y mantener diálogos que acerquen posiciones. El autoritarismo se les escapa por los poros. Cada vez más se parece al Perón del 5 por 1 y cada vez menos de un gobierno popular y nacional.
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