18 de enero

Ya 18 de enero. El primer recambio de turistas ya se concretó. El comienzo de la segunda quincena devolvió a la Ciudad rostros bronceados y hombre y mujeres a los que les cuesta darse por vencidos y todavía actúan como si estuvieran en los lugares de vacaciones. Bermudas y soleros, hojotas y musculosas son todavía su atuendo como si en lugar de ir a sus trabajos fueran a la playa.
Los “cara pálidas” llegan a los lugares de veraneo dispuestos a desquitarse de un año difícil y son observados por los veteranos veraneantes como “los nuevos”, y se escuchan los comentarios “sino se cuida , hoy no duerme”.
En el medio de las anécdotas personales se suman las vivencias colectivas: los trenes demoran el doble de lo que deberían –Cuatro horas en Castelli detenido- los accidentes de tránsito se multiplican en las rutas. Los cortes de luz “no programados” se repiten.El mundo sigue andando. Los que volvieron se muestran bronceados y descansados, los que todavía no disfrutan contando lo poco que les falta y los que están gozando su merecido descanso nada los perturba, salvo el almanaque en el que marcaron con rojo el día de regreso a la rutina del resto del año.